Victoria es la madre de una de mis mejores amigas, Rachel. Cuando estuve en Canadá de visita me dio su receta para hacer la Orisa que tanto me gustaba que me preparase cuando estábamos en Tánger. Esto es un plato sefardí que se empieza a guisar el viernes para acabarlo el sábado ya que según su religión, no se puede hacer fuego durante el shabbat y de ésta forma pueden comer caliente antes de la caída del sol. Es una pura delicia y todo queda confitado.
Ingredientes :
Una pieza de jarrete bien melosa (morcillo)
6 cebollas
3 vasos de trigo (o de cebada)
4 patatas
2 boniatos grandes (opcional)
4 huevos
2 cabezas de ajos lavadas
Perejil
Sal y pimienta
Pimentón dulce
1 cebolla sin pelar lavada
1 ñora
1 cuchara sopera colmada de azúcar moreno
Preparación :
Hervir los 3 vasos de trigo en 6 vasos de agua durante 10 minutos. Lavarlo bajo el grifo de agua fría durante otros 10 minutos.
Rehogar las 6 cebollas cortadas gruesas junto con el azúcar morena para caramelizarlas. Añadir la carne, el perejil, la sal y la pimienta y el pimentón. Llevar a ebullición en un poco de agua después de haberlo rehogado todo bien.
Añadir el trigo, mezclar todo y agregar las patatas peladas y los boniatos (opcionales), los huevos en sus cascaras y poner las dos cabezas de ajos. Agregar la cebolla sin pelar (es para dar color a los huevos por dentro) y la ñora.
Meter la olla tapada en el horno pre calentado a 150 º C durante 2 horas y bajarlo luego a 93º C, Asegurarse de que no baje el nivel del agua. De todas formas, hay gente que la pone al baño maría para que no se pegue. Yo no lo hice, y no se me pegó.
Mantenerlo así hasta el sábado por la mañana sobre las 10. Destapar y subir el fuego a 175º C hasta el medio día.
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